sábado, 20 de julio de 2013

40. PLATO ESPECIAL DE " LAS MAJAS"

Para los que no sepáis qué son "las majas" os lo voy a explicar, ya que prácticamente es un trabajo ya desaparecido en esta aldea, al haberse suprimido la siembra de cereal (trigo y centeno) desde hace bastantes años; sin embargo aún se hacen en algún pueblo, más como atracción turística o recuerdo de tiempos pasados (En Ribadelago durante el verano pasado, hicieron una muestra de cómo se recogía el trigo en la era, se majaba, se limpiaba y se recogía en el granero para ser posteriormente llevado al molino para convertirlo en harina).
Eran tiempos duros y difíciles pero todas las gentes de esta aldea se unían para ayudarse entre sí, una vez que las espigas eran llevadas a la era de cada vecino. Primeramente se esparcían las espigas en círculo y se trillaban manualmente, bien con un "manal"(palo largo con unas argollas unidas a otro palo más corto que sirve para batir golpes contra las espigas y sacar el grano) o bien con un trillo (una especie de trineo de madera bajo el cual había insertados unos "dientes" de piedras para trillar la espiga y sacar el grano) que era conducido por una pareja de vacas uncidas a él y una persona sentada sobre el trillo y que daban vuelta al círculo de paja hasta que sacaban el grano. Posteriormente, una vez se barría y quedaba el grano en el suelo, los hombres y mujeres separaban la paja y hacían con ella un "medero" que serviría para hacer la cama a los animales que tenían en la hacienda (vacas y ovejas) y también para hacer el cuelmo para cubrir los tejados de las casas o bien trenzada y dispuesta, para hacer una especie de seras o serones sobre los cuales se ponían las calderas.

Al paso del tiempo, se mecanizó y ya había máquinas trilladoras y limpiadoras que separaban el grano de la paja y estas facilitaron enormemente el trabajo.

Era en Julio cuando se hacía este trabajo, llamado "las majas" pues era la época en que se majaba el cereal.
En cada era, todos los vecinos participaban y al final de la misma, el vecino dueño de la era daba una comida de hermandad. Y todos nos sentábamos en círculos y mientras, los mayores narraban historias, chascarrillos, e incluso se cantaba y al final de la misma se bailaba también.

El vino se servía en barriles(cantimploras de barro) o en botas y el agua en botijos de barro.
Más tarde ya hubo cervezas y gaseosa.

Los niños nos sentábamos juntos y lo pasábamos de miedo, escuchando a los mayores, riéndonos y comiendo de todo e incluso bebiendo gaseosa.

La comida y la bebida eran copiosas, comenzando por jamón, chorizo, tocino, escabeche y queso y continuando con el plato "fuerte" en cuestión y terminando con fruta (cerezas, melón...) Este plato "fuerte" era diferente dependiendo de cada vecino, aunque éste que os digo a continuación, se repetía bastante:

ARROZ CON BACALAO Y JUDÍAS VERDES

Ingredientes:

1/4 Kg de migas de bacalao
1/2 Kg de arroz redondo
1/2 Kg de judías verdes
1/2 cebolla
2 dientes de ajo
1 cucharada de pimentón
5 cucharadas de aceite de oliva
Agua para cocción.

Preparación:

Desalar el bacalao (mejor el víspera). En una tartera ( aquí en una cazuela de piedra de Pereruela) se vierten dos cucharadas de aceite y cuando está a punto, se echa a rehogar la cebolla el bacalao y la judía verde cortada en trocitos y se le da unas vueltas con una cuchara de madera. A continuación se echa el arroz y se pone sal al gusto y se le añaden cinco o seis vasos de agua y se lleva a ebullición hasta que esté bien cocido todo.
En una sartén se ponen tres cucharadas de aceite y se echan los dos dientes de ajo troceados y cuando están dorados se saca del fuego y se le añade la cucharada de pimentón y se vierte sobre el arroz. se le da unas vueltas.... y ya está listo el plato para ser degustado. Si se deja reposar unas horas, ni que decir tiene que estará mucho mejor.

Mucho cariño y ¡¡¡ buen provecho¡¡¡